QT no está terminando, está evolucionando. La semana pasada, el presidente de la Fed, Powell, señaló el fin del endurecimiento cuantitativo. Pero en lugar de volver a la flexibilización cuantitativa, insinuó un cambio más sutil. En los últimos años, el balance de la Fed creció en más de 5 billones de dólares debido a la QE, y recientemente, QT lo recortó, creando puntos de presión en las reservas bancarias. Ahora, acercándose a las escasas reservas, el alejamiento puede estabilizar estos componentes vitales. ¿La conclusión oculta? Detener el QT podría alinearse con mantener la plomería financiera sin problemas, sin volver a un QE agresivo. Se trata menos de QE y más de una gestión monetaria cuidadosa.