Los estudios repetidos han demostrado que los VCs se centran en atributos superficiales de los fundadores, lo que lleva a inversiones predeciblemente malas — y a perder buenas inversiones. La razón por la que esto sucede es simple: los VCs se han convencido de que 'recaudar fondos' es un rasgo deseable en los fundadores. Así, producto de incentivos y un pensamiento recursivo, la industria convergió en un arquetipo de "fundador ideal" que puede (por lo tanto) recaudar capital más fácilmente. Por supuesto, esta tontería está erosionando los rendimientos, pero hace que invertir sea más fácil y ayuda a impulsar capital hacia su cartera mediocre. Difícil romper el hábito. Ahora, si los VCs hubieran puesto esa carga sobre sí mismos (para encontrar oportunidades) en lugar de sobre los fundadores (para encontrar capital), habrían llegado a la verdad: Grandes fundadores pueden surgir de cualquier número de orígenes; las historias de éxito siempre son excepcionales.