Francia está cambiando la forma en que grava la riqueza al incluir grandes tenencias de criptomonedas bajo una nueva regla que apunta a lo que llama "riqueza improductiva". Una nueva ley aprobada por el gobierno francés ahora aplica un impuesto del 1% a los activos netos superiores a 2 millones de euros, y esto incluye activos digitales como las criptomonedas, incluso si no han sido vendidos.