La IA no te está convirtiendo en un mejor ingeniero. Simplemente te hace más rápido para escupir código que no entiendes. Antes de que haya pensado en el problema, la IA vuelca 50 líneas en su pantalla. Presionas Aceptar. Rezas para que funcione. Luego pierdes media hora arreglando errores que no creaste y, al final, no construiste nada. La verdadera ingeniería no es escribir. Es pensar. Y la IA no puede pensar por ti.