El Servicio Secreto desmanteló una red de más de 300 servidores SIM y 100.000 tarjetas SIM en el área de Nueva York que eran capaces de paralizar los sistemas de telecomunicaciones y llevar a cabo ataques telefónicos anónimos, interrumpiendo la amenaza antes de que los líderes mundiales llegaran a la Asamblea General de la ONU. 📰 Lea más sobre esto en