Cuando Stevie Nicks conoció a la esposa de Tom Petty, le preguntó cuándo se conocieron por primera vez. Ella respondió: “a la edad de diecisiete”, pero su acento sureño hizo que Nicks lo escuchara como “el borde de diecisiete”. La frase era nueva para ella, pero permaneció en su mente y se convirtió en la inspiración para la canción.