A los neoyorquinos les encanta la autenticidad y pueden detectar a un falso a millas de distancia. Y la vibra de Mamdani en este debate es FALSA. La rutina de muñeco de cuerda de Mamdani está siendo desenmascarada por el jihadista comunista que es. Observa cómo Mamdani se quiebra con solo seguimientos muy menores.