Esta es una de mis fotos deportivas favoritas. Ese es Isaiah Thomas (1,73 m, 77 kg) después de ser seleccionado en último lugar en el draft de la NBA. Sin foco. Sin bombo. Solo un aficionado arrodillado frente a él, eligiendo creer antes que nadie. Thomas tuvo una carrera de 11 años en la NBA, fue dos veces All-Star e incluso promedió 28 puntos por partido en una temporada. Mientras miramos hacia el próximo hackathon de @Colosseum, nuestro fondo de capital de riesgo quiere ser como ese primer aficionado. Estamos buscando al fundador que no "parece el indicado", que tal vez no fue a una universidad de la Ivy League, o que no ha trabajado en grandes empresas tecnológicas o en Wall Street. Ya invertimos en muchos de esos perfiles de fundadores. Colosseum quiere convertirse en aficionados y respaldar al fundador que puede trabajar más duro, pensar mejor y competir más cada día, año tras año. El que tiene el producto que puede ser pasado por alto porque no encaja en la meta actual. Esas son las mejores inversiones a largo plazo.