Colapso del petróleo. Dado que el petróleo se considera un indicador adelantado de la actividad económica, algunos analistas interpretan esta caída como una advertencia de una inminente recesión económica o desplome. Esto no es correcto. El crecimiento de la demanda es sólido y el cobre, con un aumento de más del 20%, muestra que la actividad industrial no es tan débil como se temía. La caída del petróleo es un movimiento diseñado por el proveedor diseñado para aumentar la participación de mercado y desplazar las alternativas no competitivas. Además, el cobre muestra el cambio en el panorama industrial y automotriz. vía Bloomberg